Entre los días 13 y 22 de noviembre, el equipo de los proyectos de ASAD en Bafatá y Gabú ha realizado djumbais (encuentros) comunitarios en las 9 comunidades donde intervienen ambos proyectos. El objetivo es dar a conocer el trabajo de ASAD en la región, los proyectos en concreto y escuchar las opiniones de las mujeres, los jóvenes y los hombres.
Los componentes del proyecto de Bafatá y de Gabú son la formación profesional, la mejora de las infraestructuras de base y la comunicación y el empoderamiento de las mujeres.
ASAD trabaja en las comunidades de Lamoi, Sare Dabel, Sare Metaboido e Sare Mamudu, en el sector de Contuboel (Bafatá) y en las comunidades de Canhanque, Sintcham Mama Samba, Ponhe Maundé, Querewane y Candate Fula, en el sector de Gabú (Gabú).
Principales problemas detectados durante los djumbais en las comunidades: agua, educación y salud
Una problemática recurrente es la insuficiencia de agua para beber y regar las huertas. El grupo más afectado son las mujeres, que tienen la responsabilidad de ir a buscar agua, trabajar en las huertas y arrozales, cocinar… dinámicas que contribuyen a la desigualdad de género.
En casi todas las comunidades las mujeres tienen que recorrer cerca de 3km para tener acceso a agua potable.
Otras dificultades identificadas son el difícil acceso a la educación y la salud. La mayoría de aldeas no tienen escuelas y en las que sí hay, necesitan obras de rehabilitación profunda.
Diariamente hay niños y niñas que tienen que andar distancias de hasta 5 km (en cada trayecto) para llegar a clase, situación que dificulta muchos que los padres y madres puedan hacer acompañamiento de la escolarización de sus hijos e hijas.
Además, la distancia provoca que los niños e niñas empiecen a ir a escuela más tarde, alrededor de los 10 o 11 años, y esto también es una causa de abandono escolar y de atraso en la finalización de la educación secundaria.
El acceso a los servicios sanitarios también es un gran obstáculo: algunas personas tienen que recorrer a pie distancias de hasta 15 km, o gastar enormes sumas de dinero (10.000 francos CFA) para llegar al centro de salud más cercano. Mientras tanto, el aislamiento, la mala accesibilidad y la falta de medios de transporte limitan enormemente los desplazamientos de los enfermos, así como de las mujeres embarazadas en particular.
La población de las comunidades visitadas comprende que no pueden ser olvidada, que tiene derecho a vivir mejor y a ser escuchada. Por otro lado, es muy importante que ASAD mantenga esta comunicación constante con las comunidades, para orientar mejor las intervenciones y lograr la plena apropiación por parte de todas las personas que viven en la comunidad.
Los dos proyectos de Bafatá y Gabú están financiados por el Fondo para la Estabilización y el Desarrollo Regional en las Regiones Frágiles de los Estados Miembros de la CEDEAO (FRSD), con el apoyo del Banco Alemán de Desarrollo y la CEDEAO.